Por Gabriel Arias
[email protected]

En un extraño episodio ocurrido en el barrio de Flores e investigado por la policía de la Ciudad, un joven de 20 años falleció luego de ser baleado por un grupo de sujetos que iba a bordo de un automóvil y que escapó raudamente de la escena del hecho, aunque momentos más tarde fueron detenidos por efectivos de la Gendarmería Nacional en el cruce de la calle Bonorino y Castañares.

El episodio policial tuvo lugar a las 22 del viernes cuando un hombre de 20 años (cuyos datos filiatorios no fueron aportados por las fuerzas del orden) estaba merodeando la calle Timbó al 1.800 de dicho barrio porteño, de pronto y por causas que investiga la policía, un automóvil Peugeot 207 negro escapó rápidamente en contramano hacia la avenida Carabobo luego del sonido de algunos disparos.

Como consecuencia del acto, el joven cayó gravemente herido sobre la vereda de una vivienda y tras varios minutos, falleció en el lugar debido a las graves heridas que presentaba.

Al poco tiempo, llegó una ambulancia del SAME pero ya no había nada que hacer, aunque insólitamente, el cuerpo estuvo tendido por varias horas en la acera hasta que a las 7 del sábado fue llevado por la morguera de la policía Científica.

La situación era incómoda ya que el cuerpo del joven desnudo era visto por transeúntes y vecinos que merodeaban por la zona, hasta que finalmente fue levantado y llevado a la Morgue Judicial.

Una de las vecinas del lugar, llamada Patricia, comentó que “escuchamos dos o tres disparos, parecía como de un arma calibre 22 por la detonación, ya que no era muy fuerte. Cuando salieron algunos vecinos a ver, había un joven tirado con pantalón de gimnasia y una remera tirado en el suelo. Tenía una balazo a la altura de la cintura y todavía se movía y quejaba. Lo que escuchó mi hijo fue corre guachín, y luego se escucharon los tiros. Parecía como si estuviera escapando de alguien, porque algunas personas dicen que lo vieron subido arriba de un árbol y por eso llamaron al 911”.

Lo cierto, es que la rápida aceleración del auto negro hizo que los integrantes del rodado (se habla de tres personas al menos) desaparecieran de la escena del crimen, sin embargo, esa raid no tuvo una larga duración, ya que efectivos de la Gendarmería Nacional detuvieron a los sujetos en el cruce de las calles Bonorino y Castañares, en un operativo en el que se secuestró un arma.

En tanto, efectivos de la comisaría 38° intentan encontrar cámaras en el barrio para reconstruir el hecho.