Por: Damián Juárez
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Fue un viernes caliente para el gobierno. Políticamente intenso, con dos reuniones planificadas para unificar el discurso rumbo a la campaña electoral, que está a la vuelta de la esquina.

El primer escenario fue Vicente López. Foro nacional de intendentes de Cambiemos, con la presencia de los principales referentes de todo el país.

El lugar del encuentro no fue casual. Es el municipio liderado por Jorge Macri, el primo del presidente, quien suena como candidato a senador nacional por la provincia de Buenos Aires, pese a la resistencia a su postulación de parte de Elisa Carrió.

Lo cierto es que todavía faltan tres o cuatro semanas para que los nombres de los candidatos se confirmen.

En cuanto al nombre de Jorge Macri, lo que se analiza es si es conveniente que el apellido presidencial esté presente en la boleta, sobre todo en los distritos del conurbano (primera y tercera sección electoral), donde el peronismo es fuerte y la imagen del Presidente no es buena. Son lugares de millones de votos.

Están también internamente los que dicen que si Jorge Macri llegara perder, esto afectaría al presidente de manera directa en comparación a si pierde otro. Sin embargo, están los que piensan que si Jorge Macri gana, también es más contundente el triunfo presidencial.

Para la provincia también suenan Facundo Manes, Esteban Bullrich y Carolina Stanley, entre otros.

Esta elección será difícil

Cambiemos sabe que tiene que estar unido en esta elección. Que será más difícil que la anterior. La anterior era más "fácil". Se trataba de apuntar contra lo malo del gobierno de Cristina. Ahora Cambiemos está en el gobierno nacional, bonaerense y de la Ciudad, y las noticias económicas buenas siguen sin aparecer.

Es por ello que ayer por la tarde en un hotel porteño hubo una cumbre donde estuvieron referentes del PRO, del radicalismo y la Coalición Cívica, además de otros partidos menores aliados del gobierno.

Se habló mucho de la necesidad de salir a comunicar buenas noticias. Frigerio, el hombre a cargo de las obras y de la relación con gran parte de los referentes del interior del país, dijo que hay que salir a difundir lo que se está haciendo

El Presidente, en una charla que tuvo mano a mano con un importante funcionario de su gobierno, le dijo días pasados que veía que muchos funcionarios estaban "aburguesados", y que Cambiemos para ganar se tenía que "despertar".

La estrategia que se fijó, entonces, en estos dos encuentros de ayer fue: comunicar más los que se está haciendo, acercarse a la gente -mañana habrá un timbreo nacional muy fuerte-, y replicar el modelo de la campaña 2015.

Los que mandan en la campaña serán Mauricio Macri, Marcos Peña, Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal y el asesor ecuatoriano Jaime Durán Barba.

Afuera del armado quedó Emilio Monzó, quien en el pasado supo aceitar los vínculos con el interior del país.

Crónica también confirmó que el ex alcalde porteño Carlos Grosso es un hombre de consulta permanente en el equipo de campaña PRO.

El gobierno cree que tiene que cambiar la agenda mediática para ganar las elecciones. Que en vez de hablar de paros -docentes, CGT- se comience a hablar de cómo estaba el país en diciembre de 2015 y cómo está ahora. Mostrar gestión y comunicarla sin fisuras. Esa fue la orden.