Por Matías Resano 

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Las negligencias que impulsaron y bajo las cuales se llevó a cabo una protesta por falta de obras en el municipio de San Vicente, fueron el desencadenante de la evitable muerte de un niño de tan sólo 10 años. El pequeño se detuvo en la manifestación por curiosidad y a los pocos minutos fue arrollado por un camión que realizó una brusca maniobra para esquivar el corte improvisado por los vecinos que la organizaron, sin la presencia de las autoridades policiales, que pudieron haber evitado la tragedia.

Por lo tanto, los familiares del menor responsabilizan a los protestantes y a quienes administran el municipio, pero hasta el momento hay un sólo detenido: el chofer del transporte. El 24 de febrero vecinos de la localidad bonaerense de Domselaar se convocaron frente a la delegación municipal de San Vicente, situada en 9 de Julio y Juan B. Justo, exigiendo la reparación de las calles y la limpieza de los espacios públicos.

A las 10.30 de aquella jornada comenzaron a juntarse los manifestantes, momento en el cual Fabrizio, de 10 años, se dirigía a una bicicletería cercana y decidió detenerse, influenciado por la presencia de otros chicos de la zona. El tránsito estaba interrumpido, pero sin intervención policial alguna, situación que motivó al chofer de un camión, que cargaba materiales de construcción, a intentar pasar por medio de la protesta.

Sin embargo, los presentes le impidieron el trayecto y por lo tanto, el transportista retrocedió sin advertir que detrás de su rodado se hallaba Fabrizio, quien fue arrollado. El pequeño fue trasladado de urgencia a un centro de salud local, al cual arribó sin signos vitales, siendo en vano los 40 minutos de trabajos de reanimación realizados por los médicos.

En tanto el hecho fue caratulado como "Homicidio culposo" por las autoridades de la Fiscalía Descentralizada de Alejandro Korn, siendo el camionero el único imputado, y detenido, en la causa. Razón por la que los familiares del niño fueron quienes se manifestaron esta vez, en sucesivas jornadas, exigiendo que "queremos que se esclarezca todo porque hay muchos responsables sueltos".

El testimonio corresponde a Anabella, mamá de la víctima, quien le remarcó a "Crónica" que "la manera de protestar no es la correcta pero la municipalidad tampoco hace nada en obras públicas. Por eso decimos que es una cadena de responsabilidades, y que hubo abadono de persona".

En las próximas horas, los seres queridos se congregarán nuevamente frente a la delegación municipal exigiendo justicia.