Al grito de "¡No es mi presidente!" y al ritmo de canciones patrióticas y de protesta, unas 3.000 personas manifestaron este lunes en Nueva York contra Donald Trump, fecha en que Estados Unidos celebró el Día de los Presidentes.

Manifestantes de todas las edades y razas se concentraron bajo el sol invernal del mediodía en Columbus Circle, frente al Trump International Hotel y en el lado oeste de Central Park, para expresar su insatisfacción con el nuevo gobierno, en la última de decenas de protestas que sacudieron el país desde que Trump llegó a la Casa Blanca hace un mes.

Apenas comenzada la manifestación ya había unas 3.000 personas, según la policía, que cerró varias cuadras de la calle Central Park West.

"Trump está dañando el país. Si no hacemos algo, perderemos a Estados Unidos antes de darnos cuenta. Por eso en los últimos cuatro días he ido a cuatro protestas. ¿Qué más puedo hacer? Es la única manera de tratar de llegar al Congreso", dijo una de las manifestantes, Rima Strauss, una psicoanalista jubilada de unos 70 años.

Protestas similares en el Día de los Presidentes se realizaron en otras grandes ciudades como Los Ángeles, Chicago, Atlanta, Filadelfia y Washington DC.

"Trump no nos escucha a nosotros. Pero si la gente común marcha en las calles, quizá tengamos una suerte de revolución", señaló Strauss.

La mujer, que llevaba un prendedor con el presidente ruso Vladimir Putin sosteniendo a un bebé Trump en pañales, y que también participó en la gran protesta de la Marcha de las Mujeres el 21 de enero, al día siguiente de la investidura, dijo que también protesta para preservar su "salud mental". "Muchos de nosotros estamos deprimidos", confesó.

En la diversa Nueva York, feudo demócrata que ha batido un récord municipal de protestas anti-Trump en el último mes, esta fue la tercera manifestación seguida en tres días.

El domingo unas mil personas se reunieron en Times Square para una protesta convocada bajo el eslogan "Yo también soy musulmán", y el sábado, manifestantes hicieron un funeral simbólico para la institución de la presidencia estadounidense en el Washington Square Park.

En una esquina, una docena de manifestantes con banderas estadounidenses y carteles donde se leía "Hispanos por Trump" y "Judíos por Trump" se enfrentaron a la multitud con cánticos y gritos.

"¡No a Trump! ¡No al KKK (Ku Klux Klan)! ¡No a una América fascista!", respondían los anti-Trump mientras la orquesta tocaba "Stand up for your rights" (Defiende tus derechos), el himno por los derechos humanos de Bob Marley y Peter Tosh, y luego la patriótica "America the Beautiful". "¡No al decreto migratorio! ¡No al muro! ¡La máquina Trump debe irse!", gritaban.