Según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), el consumidor paga cinco veces más de lo que recibe el productor, ya que la brecha entre el campo y la góndola se multiplicó nuevamente en enero.

El índice IPOD (Índice de Precios en Origen y Destino) de CAME, que mide la diferencia promedio entre el importe de origen y góndola para 25 alimentos agrícolas-ganaderos subió 1,1% en enero. El IPOD agrícola aumentó 0,2% pero el IPOD ganadero trepó 6,2%.

En resumen, desde que salen del campo y hasta que llegan al consumidor, los valores de los productos agrícola-ganaderos se multiplicaron por 4,96 veces promedio en enero, lo que significó un deterioro mensual de 1,1% en la brecha de precios.

Frente al mismo mes de 2016, la mejora fue de 24,5%. Lo que explica el leve aumento en enero fue el incremento en la diferencia de la mandarina, que alcanzó un récord de 19 veces, y de la manzana, que subió a 11,54 veces. A pesar que otros 16 alimentos bajaron sus disparidades, esos aumentos, junto al del limón y de la mayoría de los productos ganaderos, contrarrestaron las bajas.

Los productos agrícolas con mayores brechas de precios en el mes fueron: la mandarina, con una diferencia de 19,1 veces, seguido por la manzana con una distorsión de 11,54 veces y la pera 9,59 veces.

En tanto los alimentos donde menos se multiplicaron los importes desde que salieron del campo y hasta que llegaron al consumidor, fueron: la zanahoria con una disparidad de 2,28 veces, el zapallito 2,35 veces, la papa y la carne de pollo (2,39 veces), y la cebolla (2,56).