Una mujer denunció que iba caminando por el barrio porteño de Caballito cuando un hombre la insultó. La joven le respondió y el sujeto le propinó un brutal golpe en la cara.

Según relató Jenn Cherry Retamozo en su cuenta de Facebook, el hecho ocurrió en la avenida Rivadavia, a una cuadra de donde vive. "Te voy a romper el orto", le habría dicho el individuo. La mujer no dudó en increparlo y contestarle, lo que desató la ira del hombre. 

“Puta de mierda, seguí caminando que a vos ya te tengo calada”, le contestó. “Me congelé. El corazón se me aceleró y sólo atiné a seguir puteándolo, diciéndole que se vaya a la mierda mientras el tipo avanzaba hacia mí”, relató la joven. Antes de que pudiera reaccionar, el sujeto la agarró fuerte del brazo y le dio una piña en el ojo. 

“Ahí se calentó. Se calentó y me dijo: a mí ninguna puta de mierda me pega. El forro me agarró un brazo y me pegó. Con toda la bronca del macho que sabe que no vale nada. Que no puede controlar nada. Me dio una piña en el medio de la cara, en el ojo, sentí sus nudillos. Creí que perdía el ojo mientras caía y me golpeaba la cabeza contra el piso”, escribió Jenn. 

Finalmente intervino la policía y algunas personas se acercaron para asistir a la joven. Sin embargo, el agresor no reparó en la presencia policial para amenazar a su víctima: “Hija de puta, yo voy a salir en ocho horas, salgo y te vuelvo a buscar. Te juro te mato”.

Retamozo fue trasladada al Hospital Durán, donde la examinaron y medicaron. Luego se dirigió hacia la comisaría para realizar la denuncia correspondiente y también relató el hecho en su Facebook.

“Esto es violencia de género: no me quiso robar, no me quiso piropear, me pegó por ser mujer, por andar sola a las dos de la tarde, porque contesté que no me puede amedrentar, no tiene derecho. Involucrarse no hace ningún mal. Al contrario, ayuda a que sean los forros lo que vivan con miedo”, concluyó.

l ojo morado, el maquillaje corrido por las lágrimas, por la impotencia y por el miedo. Una mujer relató el dramático episodio de acoso callejero que sufrió en plena vía pública y que terminó con un joven detenido por agredirla y amenazarla de muerte. En una publicación de Facebook, en la que mostró fotos, Jenn Cherry Retamozo contó que el viernes a la tarde caminaba por Avenida Rivadavia, en el barrio de Caballito. Iba con los auriculares puestos, cuando a una cuadra de llegar a su destino, sintió que alguien la tocó. Después la frase, el acoso tan impune como directo: “Te voy a romper el orto”. Entre la impotencia, la joven relató que miró al agresor y lo increpó. Pero fue peor. “Puta de mierda, seguí caminando que a vos ya te tengo calada”, le contestó. “Me congelé. El corazón se me aceleró y sólo atiné a seguir puteándolo, diciéndole que se vaya a la mierda mientras el tipo avanzaba hacia mí”. En segundos el hombre estaba sobre la mujer, tomándola del brazo, sujetándola como algo propio, dejándola sin poder de nada. Jenn contó que intentó defenderse con lo único que tenía a mano, una bolsa en la que llevaba una remera, una calza y una pollera. El relato del después son los golpes, la amenaza y de nuevo la impunidad. “Ahí se calentó. Se calentó y me dijo: a mí ninguna puta de mierda me pega. El forro me agarró un brazo y me pegó. Con toda la bronca del macho que sabe que no vale nada. Que no puede controlar nada. Me dio una piña en el medio de la cara, en el ojo, sentí sus nudillos. Creí que perdía el ojo mientras caía y me golpeaba la cabeza contra el piso”. Ya en el piso, el agresor no se detuvo. Mientras tanto llegó un policía. Se acercaron algunas personas para asistir a la joven, y aún con un policía delante, el agresor lanzó de nuevo la frase impune y ahora con una amenaza bien concreta: “Hija de puta, yo voy a salir en ocho horas, salgo y te vuelvo a buscar. Te juro te mato”. “Así, con total impunidad, en frente de muchísimas personas. No lo dijo de caliente, dijo que me tenía calada”. La joven fue trasladada al Hospital Durán, donde fue medicada, le hicieron una tomografía y luego fue hasta la comisaría para realizar la denuncia. En un nuevo posteo Jenn dijo que el agresor fue liberado a las pocas horas. Y escribió: “Esto es violencia de género: no me quiso robar, no me quiso piropear, me pegó por ser mujer, por andar sola a las dos de la tarde, porque contesté que no me puede amedrentar, no tiene derecho. Involucrarse no hace ningún mal. Al contrario, ayuda a que sean los forros lo que vivan con miedo”.