Romina Balaguer de 35 años regresó desde España a Olavarría para enfrentar a su padre que la violó durante 18 años. El hombre, Antonio Cisneros, la manoseaba desde que ella tenía pañales y confesó haberlo hecho mientras seguía comiendo y bebiendo sinicamente en un video que se convirtió en viral.

Su madre se enteró que vino a Buenos Aires y al descubrir que iba a denunciar a su papa, se apresuró hasta la comisaría y denunció a su hija por "loca drogadicta", Romina contó en dialogo con Crónica.

Por su parte, el hermanastro también la violó cuando ella tenía 13 años, hasta los 16. Vivió todos ese tiempo amenazada por su padre quien le decía que si hablaba iba a matar a su mamá. Recibió abuso sexual, violaciones, torturas, maltrato físico y psicológico de parte de los tres durante toda su vida. 

Pudo alejarse a los 19 años, conoció a su esposo que es español y se fue a vivir España con él. Estando allí intentó suicidarse en siete ocasiones por las secuelas que le dejó la traumática experiencia. "El amor de mi marido me salvó", aseguró la víctima. 

Romina decidió volver porque haber "escapado" de la situación le causó enfermedades como depresión grave recurrente e insuficiencia cardíaca. Toma 12 pastillas al día, tuvo dos abortos y debido a la medicación que toma todavía no puede ser madre. Necesitaba cerrar el círculo para salvarse. 

Contó a Crónica que padeció el Síndrome de Estocolmo, es decir, llegó a querer al abusador después de pasar tantos años con él. Hasta robaba comida para alimentarlo porque él no trabajaba. Asegura que su mente "estaba enferma". También realizó varias terapias en Barcelona donde cuenta con un equipo interdisciplinario que la ayuda a volver a amar, confiar y sentirse querida. Es auxiliar veterinaria, adiestradora canina y está en el grupo Animate.

En el Hotel Argentino donde trabajaba el acusado le dieron dinero para que se tome un taxi o remis para lograr fugarse.