"Pregúntenle a los entrenadores quién arma el equipo. Han pasado siete, ocho técnicos y nunca dijeron nada. Se le ha puesto ese mote a esta generación, vaya uno a saber por qué, pero esto es repetitivo: lo dice uno, lo dice otro, y otro, y ya la bola no se puede parar".

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Mascherano niega rotundamente que sean ellos los que arman el equipo. Dice que nunca lo hicieron, ni con Sampaoli ni con ningún otro técnico. Sin embargo, al profundizar en el tema, lo explícito empieza a darle lugar a lo implícito, a lo que es pero no es, a lo que, según el histórico volante de la Selección, "pasa en todos los equipos".

"Hay mucho de mito en todo esto", dijo en la conferencia de prensa que brindó junto a Biglia, donde comentó que "los mejores entrenadores del mundo también le piden la opinión al jugador, porque son los jugadores los que terminan tomando las decisiones dentro de la cancha". Desde el punto de vista de Masche, "no es que el entrenador vaya a consensuar: simplemente quiere saber cómo te sentís adentro de la cancha". Por eso, al tratar específicamente el tema de las charlas que mantuvieron con Sampaoli, explicó: "No se trata de imponer, es simplemente llegar a un acuerdo colectivo de dónde se siente mejor el grupo".

¿Entonces quién de​cide?

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