Con saludos que llegaron al

Vaticano

desde todo el mundo, el papa Francisco festejó este domingo su cumpleaños 81 con un grupo de niños asistidos en una clínica vaticana y luego recibió las felicitaciones de 25.000 fieles en Plaza San Pedro.

Los niños con los que el pontífice se reunió en audiencia privada en el aula Pablo VI son asistidos en el Dispensario Pediátrico “Santa Marta”, situado dentro de las dependencias vaticanas y que ofrece servicios gratuitos a menores de cinco años, en su mayoría miembros de familias inmigrantes.    
Como regalo, le llevaron una pizza de 4 metros de largo con una única vela para homenajearlo.

En medio de 81 globos de colores, el pontífice aseguró que “la alegría de los niños es un tesoro: debemos hacer lo que sea para que ellos se sientan siempre alegres, porque la alegría es como una tierra buena que hace crecer bien la vida, con buenos frutos. Y por eso se hace esta fiesta: se busca siempre la cercanía de la Navidad para encontrarnos". 

El Papa también dijo que para que crezcan felices los niños "deben hablar con los abuelos". 

"Son los dos dos extremos de la vida, porque los abuelos tienen memoria, tienen raíces y serán los ellos quienes den las raíces a los niños", consideró.

"Por favor, que no sean niños desenraizados, sin memoria de un pueblo, sin memoria de la fe, sin memoria de tantas cosas preciosas que han hecho la historia, sin memoria de los valores. Algunos abuelos ya no están porque se han ido, pero hay otros muchos ancianos que hacen de abuelos", les dijo a los chicos.

En la ciudad de Buenos Aires, el presidente italiano Sergio Mattarella le envió sus "más sentidos saludos y también de todos los italianos”.

"Le renuevo fervientes deseos de buen cumpleaños y por las próximas navidades, que uno con ganas a los de todos los italianos que miran a su magisterio con particular estima”, agregó Mattarella en una nota divulgada por la presidencia italiana. 

La alcaldesa de Roma, Virginia Raggi también se unió a los saludos y a través de Twitter le deseó un feliz cumpleaños y auguró “que su ejemplo de humanidad y fuerza sea guía para todos nosotros”.

Por su parte el mandatario de Bolivia, Evo Morales, lo saludó como “defensor de los pobres y de las causas justas, un ser humano extraordinario que aboga por la tolerancia, el respeto y la dignidad”.

También el ex presidente ecuatoriano Rafael Correa aprovechó la red social para saludarlo y lo describió como un “vendaval de frescura para la Iglesia mundial y, especialmente, latinoamericana”.

A primera hora, la heladería Hedera, sobre la peatonal Borgo Pío, a metros del

Vaticano

, le acercó al obispo de Roma la tradicional torta dedicada por su natalicio, esta vez decorada con un dibujo del artista callejero “Maupal” en la que se ve a Francisco cargando sobre sus espaldas un mapamundi dividido en dos pero vuelto a coser, en una referencia a sus llamados constantes al diálogo.

El año pasado, Francisco había festejado sus 80 años desayunando con un grupo de personas sin hogar, a las que había invitado en su residencia de Santa Marta.  

El 17 de diciembre de 2015 festejó con un grupo de chicos de la Acción Católica, momento en el que exhortó a “caminar por la senda del bien, del perdón, la paz y la solidaridad”. 

El año anterior era miércoles y como regalo para sus 78 años, en ocasión de la audiencia general, cientos de bailarines bailaron tango en la Plaza de San Pedro. 

En su primer cumpleaños como pontífice, el 17 de diciembre de 2013, Francisco también invitó a la misa en la Capilla de la Casa de Santa Marta a algunas personas sin techo, que luego desayunaron con él en el comedor de esa residencia.